19 de marzo de 2010

Horas de Soledad


EL AÑO PASADO cumplí uno de mis sueños "mágicos": trabajé en el Magic Castle de Hollywood. No sólo eso, también logré ir a Las Vegas y, por si fuera poco, lo hice con mi grupo de amigos/padrinos mágicos (Michel, Greco, Pablo Zanatta, Hacker...). Fue algo inolvidable, de lo que podría hablar mucho pero tendré que hacerlo de a poco.

Hoy, por ejemplo, y sin empezar del principio, les contaré uno de los momentos más memorables.


FUIMOS A LA CASA DE DALE SALWAK. Salwak es actualmente el director del famoso Chavez Studio of Magic. Allí estudiaron, entre otros, Channing Pollock, Lance Burton, Neil Foster (el inventor de La Bola Zombie) y Norm Nielsen. Podríamos definirla como LA escuela de la Manipulación Clásica.

Fue fundada por un gran profesional, Benny Chavez y su mujer Marian. La historia de la fundación es triste. Los dos estaban trabajando y debieron dejar sola a su bebé en la habitación, en la casa rodante. Mientras actuaban hubo un incendio en la casa; sólo se enteraron cuando volvieron. La bebé había muerto. Decidieron dejar la magia profesional (no podían actuar sin pensar en lo que había pasado) pero decidieron enseñar. Eso hicieron y el lugar se volvió de prestigio, calidad y calidez.

Recuerdo que la primera vez que lo vi en vivo a Fantasio (todavía guardo el autógrafo que me firmó) repartió a todos los presentes un papel con la noticia de que había recibido el "Chavez Memorial Trophy for Excellence in Manipulation". El papel con la información lo guardo junto al autógrafo. Volví a recordar eso cuando estuve en su casa, en Miami. En la repisa con sus trofeos estaba el del Chavez Studio y me contó que es uno de los premios que más atesora porque lo ganó sin haber sido estudiante de allí. Siempre había querido serlo, pero no le alcanzaba la plata.

Hace no sé cuanto tiempo, Salwak se hizo cargo del lugar (luego de Neil Foster).


Como dije, Salwak es una persona encantadora, que tiene una conferencia maravillosa sobre puesta en escena; una especie de "Los 5 puntos Magicos" que yo, por tonto, no ví. En Colombia tuve la posibilidad de hacerlo y la desaproveché. Yo había ido contratado para trabajar en el Flasoma y repasando el programa vi que estaba su conferencia. "Debe ser un bodrio esto" me dije, y no fui. Al otro día, lo cruzo a Juan Tamariz y me dice "Has ido a verlo a Salwak!". -No Juan, no fui. "Pues hombre, es una de las mejores conferencia que he visto". Ouch.

CUANDO DIEGO, la persona que nos acompañó y organizó la Semana Argentina en el Castillo, nos dijo que podríamos visitarlo en Los Angeles no estaba demasiado entusiasmado tampoco, aunque claro, todavía recordaba lo de Tamariz. Luego de almorzar en algún lado, fuimos. Fue fantástico.

Estábamos Salvador Sufrate, Michel, Greco, Pablo Zanatta, Pablo Kusnetzoff, Rey Ben, Diego y yo. El lugar es chiquito, una habitación de su casa. Él muy cordial, muy caballero, con paz interior. Hablamos. Hablamos como se habla en un fogón. Yo estaba sentado en el suelo con otros, Greco hizo su Sueño del Avaro, otro hizo otra cosa, hablamos de Neil Foster, nos contó la tragedia de Chavez, hablamos de Cardini (y el roce profesional con Chavez), hablamos de Jimmy Grippo (lo vio trabajar muchas veces) y de tantísimas cosas. Entre ellas, los conceptos de su conferencia. Geniales. Absolutamente. Concepto de puntuación en un acto de manipulación (deben haber puntos, comas, paréntesis, etc), el concepto del vidrio delante de uno para hacer visibles las manos y objetos, sobre la lentitud, en fin, sobre muchas cosas, muy sabias.
Habremos estado una hora. Nos prometió que nos enviaría a todos sus notas y unos artículos publicados en MUM y en otra revista sobre la escuela y Chavez. Ahí, mientras todos nos desperezábamos, nos levantábamos del suelo, nos movíamos del fogón, nos dijo algo como esto: "Pocos saben o tienen en cuenta, que los diez minutos que el artista está en la escena, simbolizan muchas, pero muchas horas de silencio y soledad".

Mutis general.

A mí, y no creo haber sido el único, se me humedecieron los ojos. No pude dejar de pensar las horas y horas de madrugada, de tarde, ensayando, pensando, leyendo, duro y parejo para lograr avanzar un pasito. Como todos. Solo hicimos silencio. El lo rompió diciendo "Yo escribí algo sobre la soledad y si me dejan, les puedo dar uno a cada uno". A todos nos regaló un libro donde pensadores, filósofos, artistas y científicos dicen algo sobre el silencio. Son muchos pensamientos y aforismos. Pero él ya nos había dado a entender todo.

NOS SACAMOS LA FOTO en su bellísima casa y nos fuimos al hotel porque debíamos prepararnos para las funciones de la noche en el Castillo Mágico. Por supuesto, esa noche nos fue a ver y nos visitó uno a uno en los camarines y a todos, nos regaló sus notas conferencias y los artículos de las revistas que había prometido con una foto suya autografiada.

Son detalles, cosas que contribuyen a que el viaje haya sido inolvidable. Fue un momento de esos donde uno no lo espera, y recibe una mano en su hombro de aliento, una mano que de alguna manera dice: "Yo lo sé".

PENSÉ EN MUSICALIZAR este recuerdo y no se me ocurría nada. En realidad, nada rápido y que, además, hablara de la soledad. No obstante, cuando pensaba en esto siempre me venía a la mente: Romance de la luna tucumana cantada por Mercedes Sosa. No habla de la soledad, pero habla de la noche y de la luna que vendrían a ser lo mismo.


(Publicado originalmente en "Nada en Esta Mano")

3 comentarios:

  1. Roberto, vi su conferencia en Colombia, debo Admitir no sabia casi nada de, solo recordaba parte de su acto, sobre todo una parte que vi mil veces ya que hacia el pañuelo a traves de del baston, y yo no sabia como era lo vi mil veces, hasta creer haber descubierto el metodo. Su conferencia claro impecable, pero sobre todo quiero destacar su acto en vivo hiper profesional, prolijo y muy magico.
    Po rotro lado el concepto del vidrio tambien lo usa David Sousa en su conferencia no vi la conferencia pero si me conto los puntos importantes y ese fue uno de los que destaco, sera otro caso de pensamientos paralelos?

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  2. El comentario anterior es mio, pero google, tomo mi cuenta del congreso por eso figura Daba tambien.

    Saludos
    Mariano Gomez

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  3. Puede ser lo de pensamientos paralelos. No vi lo de Sousa lamentablemente y juro que no fue por el mismo preconcepto que mencioné recién, sólo por no haber estado a tiempo.
    Es interesante el hecho de que Tamariz, cuando me explicó la riqueza de conceptos de la charla y me explicó lo buena que había sido, enumeró, entre varios, aquello del vidrio.

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